El asedio de los piratas era infernal, un grupo de familias emigrando de la violencia queriendo vivir en paz, una persona que dio el primer paso
Morador
La narración de hoy nos lleva a recorrer los inicios de uno de los cantones manabitas más importantes, donde las artesanías, el arte y la política se mezclan, hoy les vamos a narrar la historia del nacimiento de MONTECRISTI, cuna del viejo luchador
Retrocederemos en el tiempo, viajemos entre los años 1536-1537, en plena época colonial ecuatoriana, donde una persona de apellido “Criste” cuyo nombre de pila se le olvidó a la historia, decidió aventurarse por terrenos desconocidos, el divisó un monte. y en lo alto de este, comenzó la construcción de su nuevo hogar, una choza pequeña pero acogedora, oculta entre la flora de este cerro
El sitio fue bautizado como “El Monte de Criste” y posteriormente abreviado a “Monte Criste” por las 60 familias que fueron, algunos meses después, a refugiarse en esas tierras, huyendo de los piratas que atacaban los puertos donde vivían
El cerro era rico en paja toquilla y de Mimbrera Blanca, que es el arbusto donde obtenemos la fibra de mimbre, esto los llevó a vivir de la agricultura y de la fabricación artesanal de muebles de mimbre, hamacas tejidas y de los famosos sombreros de paja toquilla que, en un futuro, fueron bautizados erróneamente como “Panamá Hat” o sombreros de Panamá, debido a que, en ese país, se exportaban los sombreros que fueron adquiridos por los extranjeros
El nombre de sitio se fue modificando por el pasar el tiempo a MONTECRISTI, olvidando de alguna manera, a su primer habitante, en 1822 se eleva a cantón y en los primeros años de la república, se convertirse en la primera capital de los manabitas hasta que, en 1867, un terrible incendio la devastó y por decreto, Portoviejo asumió rol de ciudad capital.
La cuna de artesanías, lugar de nacimiento del presidente Eloy Alfaro, Cerros para excursión, una hermosa playa llamada San José donde desemboca el Rio Salado, un cantón hermoso, un cantón de luchadores, un cantón que se originó gracias a la valentía MONTECRISTI
Montecristi, levanta la frente
Que los pueblos admiran tu historia
La entusiasta y patriótica gente
Orgullosamente revela tu gloria.
Hasta el sol se detiene a tus plantas
Las estrellas vacilan al verte,
Y los pueblos admiran tu suerte
Escuchando los himnos que cantas.